Se utiliza como ayuda en el diagnóstico de las disfunciones tiroideas. Los anticuerpos anti-TPO se encuentran a menudo junto con los anti-Tg en la mayoría de los casos de tiroiditis de Hashimoto, mixedema primario y enfermedad de Graves-Basedow. La relación de la enfermedad autoinmunitaria tiroidea con el embarazo ha sido objeto de mucha atención al conocerse los síndromes postparto de la enfermedad tiroidea.
Asimismo, los anticuerpos anti-TPO se encuentran con frecuencia en pacientes con otras enfermedades autoinmunitarias como la artritis reumatoide, la enfermedad de Addison y la diabetes tipo I. Se detectan también en concentraciones bajas en hasta un 20% de los individuos asintomáticos, en especial en ancianos y con más frecuencia en mujeres que en hombres, aunque no está clara la importancia clínica de estos autoanticuerpos.
Esperar coagulación (de 15 a 30 minutos, no más de 2 horas). Centrifugar inmediatamente 10 minutos a 3000-3500 rpm.
Preferible: Tubo tapón rojo con gel.
Aceptable: Tubo tapón lila (EDTA) o tubo tapón verde (Heparina de litio y sodio).
Preferible: Suero
Aceptable: Plasma
TA: (20-25) °C
≤ 8 horas
R: (2-8) °C
≤ 3 días
C: -15 °C
1 mes
Lipemia fuerte. Muestra inactivada con calor o con contaminación microbiana evidente.
Cerca del 20% de los especímenes asintomáticos pueden presentar autoanticuerpos anti-TPO, lo que refleja la prevalencia en la población aparentemente sana. La prevalencia de anti-TPO también puede depender de la edad, el sexo y la zona geográfica de la población seleccionada.
Hombres y mujeres
0-150 Años < 5.61 UI/mL