Muchos hombres no hablan de su salud… hasta que algo cambia.
Pero, cuidarse no es un lujo: es una inversión en su vida, su familia y su rendimiento diario. Estas son señales que conviene no ignorar y qué puede hacer hoy mismo para revisarlas.
1) Cansancio que no se quita
Si el agotamiento persiste aunque duerma bien, puede relacionarse con anemia, tiroides, glucosa alta, estrés crónico o deficiencias nutricionales.
Revise: Hemograma, glucosa/HbA1c, TSH, ferritina, B12, test de estrés.
2) Falta de aire o dolor en el pecho al esfuerzo
No lo deje “para después”. Podría indicar un tema cardiovascular o pulmonar.
Revise: Perfil lipídico, glucosa, PCR ultrasensible, y según criterio médico, evaluación cardiovascular.
3) Cambios al orinar
Aumento de la frecuencia, ardor o chorro débil merecen evaluación, especialmente después de los 40.
Revise: Examen general de orina y urocultivo. Según edad y riesgo, antígeno prostático (PSA/APE) con consejo médico.
4) Disfunción eréctil
Además de afectar la vida sexual, puede ser un aviso temprano de problemas vasculares o metabólicos.
Revise: Glucosa/HbA1c, perfil lipídico, testosterona total y libre, test de estrés (según indicación clínica).
5) Pérdida o aumento de peso sin explicación
Cambios bruscos pueden relacionarse con metabolismo, tiroides o resistencia a la insulina.
Revise: TSH, perfil lipídico, glucosa/HbA1c, insulina, función hepática.
6) Ronquidos fuertes y pausas al dormir
La apnea del sueño eleva el riesgo cardiovascular y de diabetes.
Revise: Glucosa/HbA1c, perfil lipídico; consulte sobre evaluación de sueño.
7) Cambios en la piel y lunares
Lunares que crecen, sangran o cambian color requieren valoración médica.
Tip: Si usted tiene antecedentes familiares de infarto, diabetes o cáncer de próstata, empiece los controles antes de los 40 y repítalos anualmente.
Cuidar su salud es más que un examen: es prevenir, entender su cuerpo y actuar a tiempo.







